que rodando se termina
con avisos de infracción
y alguna desilusión.
La guadaña que segaba
la poesía se mataba
un graznido, un aullido
y un sentimiento perdido.
Porque no hubo distinción
y hasta hubo una extinción
porque todos padecieron
y las quitas las sufrieron.
Hasta algunos se mudaron
y otra cuenta comenzaron
en su intento de vivir
para evitar el partir.
Con avisos de infracción
y alguna desilusión
como rueda se termina
todo igual como en la vida.
Orlando Francisco Menéndez
Genial... Francky. Este poema es genial. Como lo llevas,eh?. Sigues a full, ya veo, dibujos... poemas. Gracias por ser como sos, y por ser mi amigo. Mary.
ResponderEliminar